Reflexiones del Dr. Thomas Lovejoy sobre el cambio climático

Las Naciones Unidas ha declarado el año 2010 el Año Internacional de la Biodiversidad, ya que la Tierra es el hogar de una gran cantidad de seres vivos, las cuales todas cooperan unas con otras para mantener la salud de la biósfera.

Nosotros los seres humanos también somos parte del ecosistema global y nuestras vidas y nuestra supervivencia están estrechamente relacionadas a la vida y supervivencia de las otras especies.

En esta ocasión compartimos las reflexiones del Dr. Thomas Lovejoy sobre el cambio climático. Este destacado científico, natural de los Estados Unidos, se ha desenvuelto como Consejero en Jefe de Biodiversidad para el Banco Mundial, además fue vicepresidente ejecutivo del Fondo Mundial para la Naturaleza – EE.UU., y además fue Consejero Adjunto para el presidente de la Fundación de Naciones Unidas.  Actualmente es Presidente de Biodiversidad del Centro Heinz, un prestigioso instituto de política ambiental de Estados Unidos.

El Dr. Lovejoy creó la idea de “canje deuda para protección de la naturaleza” entre las naciones.

Dr. LOVEJOY:

La idea de canjear la deuda por la protección de la naturaleza realmente es para cambiar la idea de la deuda y decir que hay una forma de que perdonando la deuda realmente se pueda lograr la conservación y una mejor administración ambiental.

Y básicamente es un asunto de perdonar la deuda en una moneda, a cambio de que el país en cuestión dedique su propia moneda a la conservación y a los proyectos ambientales.

Y nadie sabe cuánto de esto se ha hecho hasta hoy porque no hay un registro central, pero es evidente que al menos se trata de unos billones de dólares que se han invertido en la Conservación del medio ambiente, literalmente en todo el mundo.Nos estamos quedando atrás del desafío.  Si el 30% de todos los anfibios están en peligro, si el 10% de todas las especies de aves están en peligro, nos estamos quedando atrás.

Según la más reciente Lista Roja de las Especies Amenazadas elaborada por  la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), 17,291 especies de las 47,677 especies evaluadas están amenazadas con la extinción.

Se encontró que el 21% de todos los mamíferos conocidos, el 30% de todos los anfibios conocidos, el 12% de todas las aves conocidas y el 28% de los reptiles, el 37% de los peces de agua dulce y el 70% de las plantas y el 35% de los invertebrados evaluados hasta el momento están en peligro de desaparecer.

Jane Smart, directora del equipo de investigación del grupo advirtió que la evidencia científica de una grave crisis de extinción está en aumento.

La tasa de crecimiento de la pérdida global de especies está muy relacionada al rápido crecimiento de la industria ganadera en las décadas recientes. Muchos estudios científicos han demostrado el impacto devastador que el sector ganadero tiene en la biodiversidad.

Por ejemplo, el reporte del 2006 de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) titulado “La Larga Sombra De la Ganadería” señala que la industria ganadera es una de las causas principales de la disminución de los niveles de biodiversidad.

El reporte establece que la industria ganadera juega un papel principal en casi todos los serios problemas ambientales del planeta, incluyendo la deforestación, (***) la degradación de las tierras, contaminación, cambio climático, la sedimentación de áreas costeras y la escasez de agua (***) – las cuales tienen un impacto severamente negativo en la biodiversidad global.

Además el sector ganadero es un importante impulsor de la pesca excesiva (***) y un facilitador de especies no nativas que cambian los sistemas ecológicos en formas perjudiciales.

De acuerdo al estudio del 2005 sobre las eco-regiones terrestres del Fondo Mundial para la Naturaleza  (WWF), unas 306 de las 825 regiones conocidas de la Tierra están enfrentando amenazas por la producción ganadera.

Otro análisis de los 35 puntos conflictivos para la biodiversidad elaborado por la institución Conservación Internacional revelan que 23 ahora están afectados seriamente por la producción ganadera.

Los científicos han hallado que la cría intensiva de animales lleva a una disminución de la abundancia de especies en las áreas donde se practica la mencionada cría intensiva.  Por ejemplo, los investigadores australianos descubrieron que en las zonas de pastizales áridos del sur de Australia, dedicados a la cría intensiva de animales, el número de muchas de las especies en los prados es más bajo que en las áreas que nunca han sido usadas para criar animales.

Debido a la producción ganadera, la mayoría de la vegetación original de los prados de la región se ha destruido y ha sido reemplazada por un “jardín de pastoreo”, es decir por cultivos destinados a la ganadería.

Además, los animales nativos han perdido sus hábitats familiares debido a estos grandes espacios vacíos.

Para “La Larga Sombra del Ganado”, más de una cuarta parte de la superficie terrestre sin hielo del planeta ha sido o es usada para el pastoreo de ganado y cuando se toma en cuenta  el espacio utilizado para el cultivo que sirve de alimento al ganado, cerca de una tercera parte del total de la tierra del planeta se usa de alguna forma para la producción ganadera.

Los científicos estiman que una de cada diez especies conocidas vive en la selva amazónica y esta región tiene la mayor cantidad de biodiversidad del planeta.

Aproximadamente el 80% de las selvas del Amazonas que han sido taladas hasta ahora, han sido destruidas para dedicarlas a producir alimento para las actividades de la producción ganadera.

Un reporte del 2009 del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) cita que 26 especies de plantas y animales de la región amazónica se han extinguido debido a la destrucción de bosques, mientras que otras 644 clases de flora y fauna, incluyendo al mono araña de cara roja, al oso de anteojos,  y a la nutria, están al borde de la extinción.

En realidad, la cantidad actual de flora y fauna que (**) ya ha desaparecido es mucho mayor porque algunas especies se han extinguido antes de que los científicos tuvieran siquiera la oportunidad de enterarse de su existencia. Cuando regresemos, continuaremos nuestra conversación sobre los serios efectos de la industria ganadera sobre la biodiversidad.

Las consecuencias de la destrucción de bosques  incluyen algunos beneficios económicos a corto plazo para una pequeña cantidad de personas.  Y luego esa destrucción ocasiona problemas de salud y esencialmente destrucción del medio ambiente  y empobrecimiento para muchas más personas.

La vida vegetal y animal está sintiendo los efectos del calentamiento global y está cambiando  y se está inestabilizando en todo el mundo.

Ya está empezando a dar muestras de estar afectada; los ecosistemas (***) están empezando a fallar en ciertos lugares como los arrecifes de corales tropicales o los bosques de coníferas de América del Norte.  Al final el mundo natural es más sensible al cambio climático que cualquier otra cosa en la actualidad.

Tenemos realmente que pensar en los ecosistemas (*) y en la biodiversidad a través de toda la superficie del planeta. Y también tenemos que pensar en mantener grandes áreas naturales representativas que sean de suficiente tamaño para que continúen siendo representativas, capaces de garantizar la existencia de una amplia variedad de plantas y animales. (*)

Esa era la idea de un tamaño crítico mínimo de los ecosistemas, y cuán grande debe ser una parte para ser realmente representativa.  Si fallamos al hacerlo, es un futuro no muy seguro, no solo para el resto de los seres vivientes,  sino también para los seres humanos.

Pienso que probablemente lo más importante sería hacer lo posible para que la mayoría de las personas se den cuenta de las maravillas y bellezas de la naturaleza, del papel esencial que juega la naturaleza para que pueda existir la sociedad humana.

El individuo juega un papel realmente importante en el futuro de la vida de la Tierra. La acción individual  es parte de nuestras acciones humanas diarias.

Es parte de cómo actuamos políticamente, cómo votamos, a quiénes elegimos para ser nuestros líderes.

Tenemos que cambiar nuestra idea sobre la manera de vivir en este planeta. Tenemos que dejar de pensar que la naturaleza es algo que está separado de nosotros, como si fuera algo que ocurre en algún lugar aislado y cercado, allá afuera en el campo.

Tenemos que pensar que nosotros mismos somos la vida que está dentro de una matriz natural, y que formamos parte de la naturaleza. Tenemos que cambiar básicamente nuestra actitud acerca de cómo nos relacionamos con la naturaleza, y también cambiar nuestra conciencia diaria de ella.

Me gustaría compartir un sueño.  El sueño es que realmente pensemos a escala planetaria para restaurar la mayoría de los ecosistemas que han sido degradados y destruidos.

Tendríamos que hacer reforestación en lugares como la parte sur del Amazonas, restaurar las tierras de pastoreo degradadas en lugares como Australia, practicar la agricultura con métodos que hagan posible que el carbono excesivo acumulado en la atmósfera regrese al suelo, y que prácticamente harán que el Planeta nuevamente esté más verde de lo que está hoy.  Y con eso conseguiríamos dos cosas:  Literalmente sacaríamos una fracción significativa del dióxido de carbono que ahora está en la atmosfera, y por tanto se eliminaría algo del cambio climático que estamos enfrentando.

Pero eso también haría que todos esos ecosistemas estén más capacitados para resistir el cambio climático, y entregaría  los otros beneficios en servicio que obtenemos de los ecosistemas, sean cuencas hidrográficas o el aumento de conocimiento de, esencialmente las ciencias de la vida, que son tan importantes para nosotros.